Estefania
Estados Unidos
Prematrimonial
La verdad es que tal vez y lo que me pasó, lo busqué yo sola. Conocí a un chico a principios de Febrero, pero el problema es que estaba casado, bueno, pero la verdad es que no nos importó mucho el hecho de que él tuviera su pareja, así que comenzamos una relación paralela a su vida y a la mía, ya que nadie de mi entorno sabia que él y yo estábamos. Al mes de empezar nuestra relación quedé embarazada, yo ya me lo temía, así que decidí hacerme un test en casa de una amiga, cuando vi que el resultado era positivo me puse a llorar sin consuelo alguno, no sabía qué iba a hacer, siempre había estado en contra del aborto, pero ahora que me encontraba cara a cara con el problema, no sabia cómo reaccionar. Ese mismo día hablé con quien iba hacer el padre de mi bebé y me dijo "Mío, no es", enseguida le contesté, que de acuerdo, entonces que no se preocupara. Pero sin embargo me preguntó qué pensaba hacer, le dije que no era problema suyo, puesto que si pensaba que no era suyo… durante más de 3 días me pasé llorando, pensando en qué hacer, en sí contárselo o no a mi madre. Un Sábado por la noche decidí llamarlo y decirle que el problema también era de él... y me contestó “No me importa lo que hagas", me sentí como una de las peores mujeres del mundo, no sabia si iba a ser capaz de ser buena madre, si le podría dar a mi hijo todo lo que necesitara, si sería capaz de sacarlo adelante yo sola, si iba a tener fuerzas de decirle quién era su padre. A las 2 semanas se lo comenté a mi madre, y ella me dijo que era mi decisión y que ella no pensaba ayudarme a criarlo. Me sentí sola, sin saber qué hacer, me planteó el aborto, me quería morir, pero pensé que tal vez era lo mejor, tanto para ese hijo que nunca llegué a tener, como para mí. Creo que fui muy egoísta, pero ya no puedo hacer nada. A las 2 semanas de contárselo a mi madre, fuimos a una clínica privada y allí me practicaron un aborto por succión, es algo que jamás olvidaré y que siempre me va a afectar como persona. Sólo quiero decirles a todas esas personas que nos consideran asesinas que si lo somos, pero que el dolor que tenemos que llevar en nuestros cuerpos es algo que ya nos castiga bastante, como para que haya personas que crean que somos sin corazón. Stefania, Estados Unidos.