Lys
Puerto Rico
Anticonceptivos
Soy de Puerto Rico y tengo 29 años. Sólo escribo para contarles sobre mi horrorífica experiencia con la depo-provera. Al principio no volví a ver menstruación, luego comencé a sentir dolores de cabeza, cansancio todo el tiempo, dejadez, aumenté 15 libras (y toda la vida he sido delgada, nunca aumentaba mas de media libra) ¡je je! Sentía mucho sueño y por más que dormía me sentía igual, cambios de ánimo, pérdida de cabello. Eso y algunas cosas más fue durante dos años; cuando decidí no volver a ponérmela comenzó lo peor. Comencé a sentir ansiedad, que luego se convirtió en ataques de pánico y casi caigo en una depresión. Es difícil creerlo porque siempre había sido bien creyente y obediente a Dios. Y ahora estaba atentando contra su naturaleza divina. Comencé a ponerme la inyección porque me lo exigían para un tratamiento de acné (Accutane) y estaba a punto de casarme. ¡Quien lo diría!, caí en lo que tanto había criticado. Mi médico nunca aceptó que fuera a causa de la inyección, pero yo hice lo imposible por buscar más información y todavía me sorprende el ver cómo juegan con nuestra salud y nos utilizan de conejillos de indias para sus experimentos anti-humanos. Créanme hay mucha información acerca de estos métodos y existen médicos (aunque muy pocos) que se preocupan por ejercer de manera honesta. No usen ningún método anticonceptivo y aconsejemos a los jóvenes ¡por favor!: si no quieren embarazos, o alguna enfermedad de transmisión sexual, simplemente absténganse. No vivan a la velocidad que el mundo va, vivan la vida al tiempo de Jesucristo, plena, todo a su tiempo y con mucha conciencia y temor a Dios, que es a quien le daremos cuentas al final de todo. Lys.